Hay que seguir andando sin miedo
Lourdes y Milagros cierran la serie de notas sobre la Acampada Juvenil realizada a fines de mayo en Olta
Lourdes – Pastoral Juventud Diocesana
- ¿Cómo viviste este encuentro con los jóvenes de los Llanos de la Provincia?
La verdad, fue maravilloso. Me fui encontrando con muchos jóvenes y cada uno de ellos más alegre que el otro. En esa edad y etapa que quieren compartir, gritar y bailar y hacer ese lio lindo que necesitamos cada vez más en La Rioja y en la iglesia en los jóvenes y la verdad es súper lindo.
- ¿Qué pudiste apreciar en los jóvenes presentes?
La capacidad que tiene para hablar y expresarse. Por ahí a muchos jóvenes les cuesta abrirse y hablar, pero entre tantas actividades dinámicas que se hicieron, los chicos pudieron expresar sus realidades, sus miedos, sus dudas, expresar cual es la iglesia que quieren que eso es lo fantástico que puedan hacer.
- ¿Algo que te haya conmovido durante la acampada?
Si bien faltan horas para terminar, creo que nos falta muchos por vivir. Pero el momento de oración con las velas, entrar en ese clima profundo de oración y ver que los chicos también necesitan de eso, lo vivieron y lo disfrutaron fue lo que más me conmovió.
- Para agregar ¿qué les dirías a los jóvenes?
Que se animen. Tengo camino para andar, no tener miedo de decir hacemos lio, hagamos lio y que sigamos haciendo lio sin cansarse de eso, pero que siempre se animen.
Milagros – Ministerio de la Música – Malanzán
- ¿Cómo viviste esta acampada? ¿es la primera vez que participas?
Ya tuve una experiencia parecida en Tama con los jóvenes. Estos acontecimientos que nos permiten encontrarnos y conocernos la viví de la mejor manera. Es muy lindo e importante contar con estos encuentros para los jóvenes. Para que nos tengan en cuenta lo muchos que valemos.
- ¿Qué te llevas de acá?
Me llevo muchos amigos, muchos recuerdos, los abrazos, las risas y el llanto. Lo más importante es el haber compartido un pedazo de su vida con la mía, yo poder compartir con ellos y eso me hace muy feliz.
- ¿Qué te motivo venir a la acampada?
Sentí la necesidad de aprender más, de participar, hablar, contar algo que me pasó.
- En base a lo vivido aquí ¿Qué le dirías a los jóvenes?
El amor de Dios es lo más grande. Que confíen siempre porque Dios es lo primero y que abran su corazón porque siempre está ahí, nunca estarán solos y nunca duden de lo capaz que son de lograr lo que quieren en su vida.
