A manera de presentación:
Monseñor Angelelli asumió la pastoral popular de La Rioja dándole “vida nueva”. Escuchando atentamente la expresión sencilla de su pueblo promovió la piedad popular y desde allí trabajó con gran celo para socorrer a los más pobres y desfavorecidos.
Con sus propias palabras describía así lo que significaba celebrar una novena y una fiesta patronal: “En La Rioja tenemos el privilegio de tener “encuentros de pueblo” en las variadas y múltiples preparaciones y novenarios de las Fiestas Patronales. Las debemos aprovechar muy bien. Una Novena Patronal es un tiempo especial de gracia que nos regala Nuestro Padre Dios. Es tiempo para conocer y reflexionar más el
Evangelio y desde allí iluminar la vida personal y la de nuestros pueblos y comunidades, es tiempo de mayor oración personal y comunitario, es tiempo para revisar lo que se nos exige hoy para vivir hermanados como ciudadanos, es tiempo de reconciliación interior para tener paz en la conciencia y reconciliarnos como miembros de una familia, como
vecinos, como hijos del pueblo donde vivimos, es tiempo de creatividad para buscar juntos las soluciones a los problemas que tenemos en los pueblos y comunidades, es tiempo de hacer madurar la Fe por el conocimiento de la doctrina y por la mayor participación en los sacramentos de la Penitencia y de la Eucaristía. Es el tiempo del
encuentro alegre de parientes y amigos que regresan al pueblo después de mucho tiempo, es tiempo de acogida” 1
La alegría por la Beatificación de nuestros Mártires aún sigue resonando en nuestros corazones. Esta misma alegría nos dispone a celebrar la primera novena –diocesana y comunitaria- que nos preparará para celebrar la entrega generosa de los “Testigos de nuestra Iglesia” Que sea un tiempo de alegría, de encuentro, de fiesta. A ellos encomendemos nuestra vida para que sean, como nuestro patrono San Nicolás, protectores e intercesores de nuestro pueblo riojano.
La presente es una propuesta de novena que contiene textos de la Sagrada Escritura y del magisterio de Mons. Angelelli. No pretende ser un material acabado, sino una guía que oriente un momento de oración y reflexión. Al final de la novena colocamos las biografías de nuestros mártires para que hagamos extensivo el testimonio de entrega
de nuestros Beatos.