Nace en nuestra Diócesis el Equipo de Espiritualidad

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“Nadie camina solo”

En la Diócesis de La Rioja se creó el Equipo Diocesano de Espiritualidad que ya había sido anunciado por Monseñor Braida en su Mensaje del 1 de enero de 2025.

Coversamos con la Hermana Carmen María Rauch (ecj), coordinadora del equipo, quien nos contó de qué se trata.

Es un espacio que invita a discernir nuestra espiritualidad, mostrando a Cristo desde el amor, la fe y la esperanza integrando las dimensiones humanas de la persona, sus búsquedas espirituales y su destino a construir otro mundo posible que no es otra cosa de lo que Jesús de Nazaret llamaba “Reino de Dios”. Presenta principalmente la espiritualidad ignaciana con los Ejercicios Espirituales de San Ignacio pero incluye también toda forma de camino espiritual.

Fue un pedido de Obispo viendo el deseo de ahondar en la experiencia de  Dios que el pueblo manifiesta. Lo forman también Laura Molina, Lourdes Vizcarra, Exequiel Gómez y Paola González de La Rioja ciudad y Pamela Correa y Claudia Rivas de Chilecito.

Es sin duda un servicio de misericordia y esperanza de acogida y animación que nos coloca a caminar con el otro, para ayudarle en su propio crecimiento integral.

Está a disposición de las parroquias y comunidades de toda nuestra diócesis y ofrece:

  • Retiros de un día y medio
  • Talleres de oración
  • Talleres de autoconocimiento para jóvenes

En estos comienzos dedicamos momentos especiales para conocer y rezar para poder ir caminando juntos y discernir ante Dios el mejor servicio que puedan ofrecer.

Oportunamente se darán a conocer las fechas y horarios de los Talleres y por pedir el servicio de este Equipo pueden comunicarse con la Hna Carmen al 3513199947

¡Gracias por esta Misión! Que la Virgen y nuestros mártires los bendigan!

“La sinodalidad es ante todo una disposición espiritual que impregna la vida cotidiana de los bautizados y todos los aspectos de la misión de la Iglesia. Una espiritualidad sinodal brota de la acción del Espíritu Santo y requiere escucha de la Palabra de Dios, contemplación, silencio y conversión del corazón. Nadie puede recorrer solo un camino de auténtica espiritualidad. Necesitamos acompañamiento y apoyo, incluida la formación y la dirección espiritual, como individuos y como comunidad.”

XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos N°43