Los hermanos Arlain y Arlonce Pierre nacieron hace 50 años en Cabo Haitiano, República de Haití. Son parte de una numerosa familia católica de 12 hermanos y ya no saben cuántos sobrinos y sobrinos nietos.
Fuente: Comunicación Diócesis de La Rioja
Estudiando en la capital, Puerto Príncipe, conocieron a la Congregación de Misioneros de San Carlos Borromeo más conocidos como Scalabrinianos quienes tienen como carisma la caridad hacia los migrantes.
Arlain estudiaba Profesorado en Francés y Arlonce Filosofía. Allí sintieron el llamado a servir a Jesús desde el sacerdocio.
El Área de Comunicación de la Diócesis de La Rioja conversó con ellos ya que Arlonce es sacerdote de dicha Iglesia local.
Al verlos no es posible distinguirlos, son portadores de la alegría caribeña y una amplia sonrisa. Juegan con su parecido y se hacen pasar uno por otro ante el interlocutor.
Cuentan que Arlain fue quien se decidió primero a entrar a la congregación de los Scalabrinianos en 1998 a sus 24 años. Recibió la formación en Haití, Colombia y Roma, fue ordenado sacerdote el 18 de agosto de 2007 y estuvo de misionero en Mozambique, Sudáfrica e Italia. Actualmente se encuentra en la Parroquia San Pedro en el Puerto de Calais en Francia.
Arlonce tuvo otro camino, ingresó en 1999 a los 25 años a los Scalabrinianos. También inició la formación en Haití y cuando la estaba completando en Argentina junto a su amigo Gerson Dufresne, conocieron en 2010 en Buenos Aires, al Obispo de La Rioja Monseñor Roberto Rodríguez.
Siguen contando entusiasmados a nuestra Área de Comunicación Diocesana que Dios tenía marcados sus caminos al que se agregó también Gerson, hoy también sacerdote y párroco de Nuestra Señora del Valle en la Ciudad de La Rioja.
Monseñor Rodríguez les habló a Gerson y Arlonce de La Rioja y sus posibilidades misioneras. Es así como llegaron a nuestra diócesis y fueron ordenados diáconos el 18 de diciembre de 2010.
El 25 de mayo de 2011, en Cabo Haitiano y con su hermano Arlain, Arlonce fue ordenado sacerdote por Monseñor Rodríguez.
Los mellizos Pierre se comunican todos los días y presienten lo que le pasa al otro, también coinciden que extrañan la tierra natal y sus bellos paisajes ; destacan la alegría y el espíritu de lucha de su gente, la esperanza en el mañana y la ausencia de lamentaciones ante lo adverso. La última vez que los dos coincidieron en Haití junto a la familia fue hace 10 años. El 24 de enero de 2024, al cumplir 50 años (o 100 entre los dos como risueñamente dicen), Arlain vino a Argentina a visitar a Arlonce. Estuvieron varios días juntos y disfrutaron mucho del encuentro.
Arlaine dice que la mayor virtud de Arlonce es el modo en que empatiza y se hace querer por todos y su gran convicción y Arlonce dice de Arlain que es demasiado bueno y sensible y por eso lo anima a seguir adelante acompañando a los migrantes.
Les pedimos un mensaje para los jóvenes y ambos coincidieron en decir que no tengan miedo al llamado del Señor que aunque signifique una renuncia como ellos a su tierra, Dios bendice la valentía.