Monseñor José Díaz – Obispo de Concepción
“En democracia, desde el Evangelio, construimos el futuro que soñamos”.
Bienvenidos a participar de este primer Encuentro Regional de pastoral social. Muchas gracias por el esfuerzo de llegar hasta aquí. Muchas gracias a Mons. Dante Braida que aceptó el desafío de llevar a cabo este Encuentro en la Diócesis de La Rioja junto a todo su equipo de trabajo que tan bien lo hacen, previendo todo lo necesario para el desarrollo del mismo.
En ocasión de celebrar 40 años de democracia continua, 10 años del Pontificado del Papa Francisco y 100 años del nacimiento del Beato Obispo Enrique Angelelli, nos reunimos movidos por el mandato del Señor de anunciar la buena noticia de la Salvación a nuestra Región del Noroeste argentino, urgidos por el amor de Dios a su pueblo y por la común preocupación que como pastoral social del NOA tenemos ante la difícil situación socio económica que nos toca afrontar como Iglesia y como sociedad.
Nuestra mirada es pastoral. No somos técnicos de la política, la economía o la sociedad, somos peregrinos que caminan en medio del pueblo, que ven y escuchan compasivamente el dolor de nuestra gente, muchas veces con impotencia, otras con indignación, pero siempre con esperanza.
Venimos a escucharnos y compartir nuestras cuitas, nuestras penas, pero también nuestros anhelos de vida nueva y las experiencias que nos hagan vislumbrar caminos que nos conduzcan a una vida más digna y más plena.
No venimos a trasferir responsabilidades, sabemos que los católicos somos una presencia mayoritaria y que nos cabe responsabilidad por la situación que nos toca, pero también, sabemos que nuestra misión es profética y que debemos hablar y echar luz para ayudar a entender y discernir solidaria y sinodalmente.
Creemos y anunciamos que es posible revertir las tendencias de enfrentamiento que dominan nuestras relaciones y nos llevan a un constante desencuentro. En democracia, nuestras convicciones deben exponerse y valorarse desde la racionalidad en la búsqueda de la verdad, el trabajo por la unidad y actitudes comprometidas por el bien común.
Lejos de la indiferencia y el sálvese quien pueda, fruto del individualismo, queremos ser una comunidad atenta y comprometida, cercana y llena de vida que trasunte y contagie su fe, esperanza y caridad en el trabajo cotidiano constante, sin búsquedas estériles de poder, control o dominación.
Trabajamos por el bien de todos, sin excluir a nadie, pero privilegiando a los pobres, a los excluidos, a quiénes no se les reconoce el derecho a vivir y son arrojados fuera del sistema o a un tacho de basura.
En medio de rumores de guerra, anunciamos la paz que viene de Dios pero también es fruto de la justicia, el diálogo y la amistad social.
No nos resignamos a vivir en una democracia mediocre y corrupta, no queremos nivelar para abajo, creemos en la fuerza moral de nuestro pueblo y el valor transformador de la educación desde nuestras familias hasta los más altos niveles académicos.
Si miramos el pasado, lo hacemos no para ensañarnos con errores ajenos sino para aprender la lección y consolidar los aciertos. En el pasado vemos también los rostros de quiénes fundaron nuestra Patria y trabajaron denodadamente para construirla. En el presente vemos la enorme responsabilidad de tomar las decisiones correctas para que las nuevas generaciones hereden una Patria mejor.
No queremos mirar para otro lado ante el criminal avance del narcotráfico que arrasa con la vida de nuestros jóvenes, adolescentes y niños.
Sabemos que necesitamos convertirnos pastoralmente, desde los Obispos hasta el último bautizado. Sin conversión no hay renovación posible. Cambiaremos leyes y metodologías pero no el corazón.
Confiando en la acción del Espíritu Santo, el iluminador magisterio del Papa Francisco, el testimonio del Beato Obispo Enrique Angelelli, con la ayuda de nuestros expositores y el rico diálogo que caracterizará a nuestro primer Encuentro Regional de Pastoral Social, ponemos todo bajo la poderosa intercesión de nuestra Madre del Valle, patrona de nuestra Región y de San Nicolás patrono de La Rioja.
+ José Antonio Díaz
Teresa Hernández – Laica de Tucumán
Apertura del Encuentro de Pastoral social del Noa .La Rioja14/15/16 de Julio 2023
Quiero agradecer la posibilidad de estar aquí, todos juntos, los equipos pastorales de todas nuestras diócesis y celebrar este encuentro que hemos venido pensando y construyendo juntos y que nos va a dar vida y fuerza para el camino a seguir.
Quiero plantearnos algunas preguntas para ponernos en situación.
¿Por qué hacemos este encuentro de todo el noa en La Rioja?
Esta pregunta tiene un sentido profundo, porque es una decisión que tomamos entre todos y que tiene que ver con nuestra identidad.
La identidad del Noa, de nuestras provincias, la cultura que es diferente al resto del país y conlleva rasgos propios y originales de los problemas sociales.
Tenemos el derecho y la obligación moral de tener una mirada especial, colectiva y situada en la problemática del Noa.
Porque sabemos que nuestros problemas suelen ser vistos por la cultura dominante como rémoras de un pasado colonial, donde nos aferramos al cuidado de la tierra, defendemos comunidades indígenas, y somos “vagos y perezosos”, atrasados culturalmente y dependientes del estado, entre otras falsas miradas de la “ modernidad capitalista».
Por eso es importante defender nuestras identidades, nuestras realidades y también nuestras posibilidades como Región. El desafío de este encuentro del Noa va a ser precisamente pensarnos situados para poder encontrar nuestras respuestas y nuestro accionar.
Les propongo plantearnos: ¿Quiénes somos?
somos laicos ,sacerdotes y obispos que constituimos las comisiones de Pastoral social en las diócesis Del Noroeste Argentino, pero también somos padres de familia, trabajadores, dirigentes sociales y políticos, hombres y mujeres que vivimos nuestras vidas inmersos en realidades que cuestionan nuestra misión de ser luz y Sal de la Tierra.
¿Para qué realizamos este encuentro?
para reflexionar juntos sobre nuestra misión hoy, concreta y real, para hacer resonar la palabra liberadora del Evangelio en el complejo mundo de la producción, del trabajo ,de la empresa ,de las finanzas, de la política ,de la justicia ,de la cultura ,de las comunicaciones sociales en el que vive el hombre y la mujer actual.
Estamos aquí para profundizar el conocimiento de la Doctrina social de la Iglesia, que con Su riqueza nos ilumina para encontrar los caminos de redención, Liberación y promoción de la dignidad humana.
También para renovar nuestro compromiso de fe en Jesucristo en la iglesia y en la comunidad humana en la que vivimos, asumiendo la responsabilidad de ser fermento en la masa.
Tenemos una gran Esperanza que estas jornadas sirvan a nuestras diócesis y a cada uno de los participantes para renovar la fe, la esperanza y la Caridad.
Que el diálogo fraterno y la convivencia de estos días surja la alegría, la luz, la fuerza de Jesús resucitado, que está aquí con nosotros y nos pide: “vayan en mi nombre “.
En el marco de estas jornadas que son los 40 años de la Democracia, que cuestionan a todos los argentinos y especialmente, creo que nos cuestionan sobre si esta democracia ha logrado mejorar la vida de los hombres y las mujeres del país, que las deudas que todavía están pendientes sean también un momento de reflexión y de pensamiento de nuestro accionar. Los 10 años del pontificado de Francisco nos convocan a mirar de nuevo nuestras realidades ,cuando ha desafiado a toda la iglesia a ponerse en salida y nos ha planteado desde la profundidad de su palabra la necesidad de cuestionarnos cómo hacemos las cosas, para quién las hacemos, con qué convencimiento y nos
Clama con urgencia el cuidado de la tierra. El hecho de que estemos hoy también aquí en La Rioja tierra de Mártires, Recordando a monseñor Angelelli nos pone en la disyuntiva de plantearnos que con su ejemplo, con su vida, nos está diciendo que vale la pena y que tiene sentido dar la vida por lo que uno cree.
Palabras de bienvenida de Monseñor Dante Braida – Obispo de La Rioja
Buenas tardes: En primer lugar sean todos bienvenidos y bienvenidas a La Rioja. Especialmente a quienes vienen de lejos de distintos lugares del NOA.
Bienvenidos a quienes vinieron del interior de la provincia y a los más cercanos que proceden de la ciudad Capital.
Bienvenidos a los Obispos que participan y a las autoridades presentes.
Este Encuentro surge como iniciativa de la Pastoral Social del NOA a fines del año pasado y se fue concretando en febrero cuando los obispos vimos con beneplácito la propuesta y nos sumamos a la iniciativa haciendo algunos aportes.
Reunirnos ya es un fruto del Encuentro, y poder reflexionar sobre la democracia buscando caminos para desarrollar una mayor participación ciudadana en la construcción de la sociedad es un fruto que queremos producir en estos días.
Queremos celebrar los 40 años ininterrumpidos de Democracia y, a la vez, queremos buscar caminos para mejorarla. Por eso, en primer lugar, queremos hacer una memoria agradecida del camino recorrido reconociendo logros, deudas y desafíos hacia adelante.
Decía hace unos días Adolfo Pérez Esquivel nuestra democracia es todavía muy ‘delegativa’ elegimos nuestros representantes y esperamos que ellos resuelvan todos los problemas. Hacia adelante necesitamos una democracia más ‘participativa’.
El Lema que nos convoca es: “En democracia, desde el Evangelio, construimos el futuro que soñamos”
En estos días, para sumar al crecimiento, queremos valernos de las enseñanzas del papa Francisco y del beato Angelelli en el centenario de su nacimiento.
Francisco desde su primer exhortación a meses de haber asumido, “La alegría del Evangelio” (Evangelii Gaudium), subraya la importancia tener en cuenta la dimensión social de la fe. Allí dice que aceptar el Evangelio en la vida, dejarse amar por Dios conlleva en el creyente una “primera y fundamental reacción: desear, buscar y cuidar el bien de los demás” (EG 178). Y continua “La Palabra de Dios enseña que en el hermano está la permanente prolongación de la Encarnación para cada uno de nosotros: «Lo que hicisteis a uno de estos hermanos míos más pequeños, lo hicisteis a mí» (Mt 25,40). (EG 179)
“…Todos los cristianos, también los Pastores, están llamados a preocuparse por la construcción de un mundo mejor… el pensamiento social de la Iglesia es ante todo positivo y propositivo, orienta una acción transformadora, y en ese sentido no deja de ser un signo de esperanza que brota del corazón amante de Jesucristo…” (EG 183)
Así mismo toda acción transformadora de la sociedad tiene que tener especial atención a los pobres y los más desprotegidos. En este sentido sostiene Francisco, “De nuestra fe en Cristo hecho pobre, y siempre cercano a los pobres y excluidos, brota la preocupación por el desarrollo integral de los más abandonados de la sociedad. Cada cristiano y cada comunidad están llamados a ser instrumentos de Dios para la liberación y promoción de los pobres, de manera que puedan integrarse plenamente en la sociedad; esto supone que seamos dóciles y atentos para escuchar el clamor del pobre y socorrerlo.” (EG 186-187)
El NOA tiene variadas y ricas expresiones de fe en sus fiestas patronales, en sus peregrinaciones, cabalgatas, etc. Al mismo tiempo el compromiso social cotidiano con las realidades concretas de nuestro mundo es también un modo claro, concreto e indispensable de expresar nuestra fe, de asumir y encarnar el Evangelio.
El beato Angelelli nos dio un claro ejemplo de una fe vivida y comprometida en el ámbito social. Desde el Evangelio incentivó, con el espíritu del Concilio Vativano II, a los laicos al compromiso en el mundo y las instituciones sociales. Decía en su primera homilía a los laicos: “piensen, reflexionen, dialoguen, opinen, participen, oigan, aprendan, obedezcan, intervengan, inquiétense, angústiense por los demás, sean solidarios y corresponsables con todos… El lugar de ustedes es estar comprometidos en lo temporal, en el desarrollo integral del pueblo riojano”. (Primer Mensaje a la Diócesis de La Rioja)
Por ello promovió, entre tantas actividades, los sindicatos, el trabajo cooperativo, la erradicación de la pobreza, la participación social y política, etc.
El repetía mucho que su mensaje esta para creyentes y no creyentes, porque todos estamos llamados a participar positivamente en la construcción de una sociedad más justa y fraterna.
Para contribuir al crecimiento de la democracia tenemos que aprovechar cada instancia de participación. Ahora nos disponemos a participar de este mismo Encuentro. Los invito a que con toda libertad hagamos los aportes que nos parecen oportunos teniendo siempre presente el objetivo que nos convoca: “Promover una mayor participación ciudadana y un compromiso corresponsable de cada persona e institución en la construcción de una sociedad más justa y solidaria donde nadie quede excluido.”
¡Siéntanse bienvenidos, están en su casa, buen y provechoso Encuentro Social del NOA 2023!